CRYPTOART Y NFT: LA CONTROVERSIA CLIMÁTICA EXPLICADA

may2021

Últimamente el cryptoart ha subido como la espuma en cuanto a su popularidad, pero no todo es color de rosa. Ya que los bitcoin y NFT (activo digital almacenado en tecnología blockchain) se encuentran en la mira del mundo, pues después de investigaciones los expertos en el tema han exhibido el gran impacto climático este tipo de prácticas.

Probablemente todavía nos encontramos un poco ajenos a esta tecnología, por eso iremos desglosando poco a poco ambos términos.

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¿Qué es el cryptoart?

En español, el arte criptográfico es una categoría de arte relacionada con la tecnología blockchain. Surge como un género de nicho de trabajo artístico gracias al desarrollo de redes blockchain como Bitcoin y Ethereum. Esto comienza a mediados y finales de la década de 2010, desde entonces el arte criptográfico se hizo popular rápidamente. Principalmente por la capacidad sin precedentes que ofrece la tecnología para que cualquier persona compre, venda o recopile obras de arte puramente digitales. En resumen, el arte criptográfico es arte digital pero en blockchain.

Los NFT

Hablamos de términos un poco confusos y probablemente todavía nuevos. Un NFT son las siglas de Non-Fungible Token. Podría ser como un certificado de autenticidad, escritura o propiedad de un activo, por lo que es esto lo que se puede vender, es la última tecnología en criptomonedas y son creados en la plataforma Ethereum.

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El impacto al medio ambiente

Una de las características que menos ha hecho ruido sobre blockchain, es que ha causado una especie de controversia en el mundo del arte por la huella de carbono. El arte criptográfico, que había sido visto como un espacio para artistas que buscaban derechos de reventa más fuertes y protecciones contra la infracción de los derechos de autor, así como una escena más inclusiva que las instituciones tradicionales del mundo del arte. Están envueltos en el debate sobre el impacto que genera al medio ambiente.

Muchos en la comunidad están buscando alternativas que sean más ecológicas. El meollo del asunto recae en los procesos físicos, los cuales usan muchas plataformas para codificar la obra de arte en la cadena de bloques usan electricidad, y mucha. Resulta que la energía es ridículamente grande por lo que son ecológicamente destructivas algunas de las actividades basadas en blockchain, por ejemplo las relacionadas con este tipo de arte.

A partir de las investigaciones que se han realizado sobre el impacto que se tiene del crypart, la comunidad que la conforma se ha dividido. Algunos artistas y personas realmente comprometidas con el medio ambiente, se están desvinculando por completo hasta que se creen soluciones sostenibles. Y por el otro lado todavía existen aquellos que niegan por completo la realidad que consume energía.

Esperemos que muy pronto pueda encontrarse un punto medio para regular y encontrar las soluciones al impacto ecológico, pues estaba trayendo muy buenas opciones para distintas ramas de la industria alrededor del bitcoin. Afortunadamente existe un impulso para encontrar sistemas más eficientes energéticamente que preservarán las ventajas del cryptoart.