Pal Enger, el «cómico» que robó «El grito» de Edvard Munch
ARTE

Pal Enger, el «cómico» que robó «El grito» de Edvard Munch

El 12 de febrero de 1994, “El grito” la obra más representativa del artista noruego Edvard Munch fue sustraída de la Galería Nacional de Oslo en 50 segundos por Pal Enger, empleando únicamente una escalera común y corriente. 

Aunque el cuadro sufrió distintos eventos atípicos en su historia, este es quizá el más famoso y radical por la dimensión y hasta comicidad con que fue cometido. El ladrón Pal Enger declaró que no lo movió el dinero sino la diversión, el reto y el juego.

Enger dejó una nota en el lugar que decía: “Muchas gracias por la mala vigilancia” Haciendo alusión a que en esos momentos, una tercera parte de la policía se encontraba concentrada en el cuidado de la ceremonia de los Juegos Olímpicos de Invierno de Lillehammer. 

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Pal Enger

Pal confesó en 2008 al diario noruego VG que planeó durante cuatro años el plagio y le causaba mucha gracia que mientras la policía volteaba de cabeza al país para la búsqueda de la pieza de arte, sus familiares merendaban sobre el cuadro, ya que lo escondió entre los tableros de la mesa del comedor. 

La tetra finalizó tres meses después de la sustracción. Pal Enger fue capturado y el cuadro de “El grito” fue encontrado en una habitación de hotel en Åsgårdstrand, una localidad al sur de la capital noruega.

Pal Enger robo la reproducción más grande y famosa de las cuatro hechas por el artista Edvard Munch. En 2004, dos sujetos entraron armados al museo de Oslo para robar otra reproducción de Munch junto a la Madonna del mismo artista para después salir huyendo en un automóvil que los esperaba a las afueras del recinto. 

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Pal Enger

Este robo resaltó la inacción de parte de los cuerpos policíacos frente a dos sujetos que tenían muy bien planeada la estrategia que consistió en arribar al lugar y amagar a los asistentes con la amenaza de que aquel que no siguiera sus indicaciones, recibiría un disparo. El saldo de víctimas fue nulo dado que los visitantes se tiraron al suelo en medio de la angustia que les generó presenciar un robo a mano armada.

¿Qué es entonces aquello tan atractivo en el arte de Edvard Munch que orilla a las personas a cometer atracos que han marcado hitos en la historia de los delitos contra el arte?

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Stephanye Reyes

Periodista en deformación. Humana por imposición, bruja por elección. Ojos defectuosos pero talentosos. Hago fotografía de todo lo que mis miopes ojos ven: Ig:bruja_amapola