Cuando pensamos en Hollywood y en las grandes estrellas del mundo, nos vienen a la cabeza sus glamurosos estrenos, sus mansiones, sus vacaciones de lujo y la publicidad masiva de sus marcas. En lo que probablemente no pensamos es en la cantidad de horas que deben pasar en el set de rodaje, sentados en la silla de maquillaje, en la puesta en escena y en la preparación del decorado.
Para tener una visión única de lo que supone ser una estrella en el rodaje, hemos elaborado una lista de algunas curiosidades detrás de cámaras en algunas de las películas más famosas y queridas por todos.
Christopher Nolan se convirtió en granjero durante el rodaje de Interstellar
A Nolan no le gustaba la idea de utilizar CGI para crear la granja de maíz que aparece en la película, así que decidió cultivarla. Para ello, se arriesgó bastante (100.000 dólares, para ser exactos), ya que tuvo que cultivar un campo de maíz desde cero en el oeste de Canadá, donde se rodó la película.
Una rivalidad amistosa entre Ben Affleck y Tobey Maguire
Con muchas horas de rodaje y una gran necesidad de entretenimiento, los dos actores descubrieron una afición mutua por los juegos de casino y se rumorea que se quedaban jugando al póquer hasta altas horas de la noche. La pregunta de quién era mejor quedó resuelta cuando se supo que Maguire organizaba torneos de póquer para muchos actores de Hollywood de alto nivel, entre ellos Affleck, con los que ganó entre 30 y 40 millones de dólares en 4 años.
Harry Potter y el perro protector
Durante el rodaje de Harry Potter y la cámara secreta, Bella, la mastina napolitana que interpretaba a Fang, se volvió muy protectora con Daniel Radcliffe y saltaba delante de él cada vez que la araña animatrónica de Aragog salía a defenderle, lo que obligó a volver a rodar algunas escenas varias veces.
George Clooney se peleó con su director por culpa de la meditación
Cuando el director David O. Russell fichó a Clooney para la película Tres reyes, sobre la guerra del Golfo, pocos sabían que se había propuesto transformar a su protagonista. Se obsesionó con la idea de dejar a Clooney irreconocible y le pidió que meditara durante horas. Clooney aceptó el reto, pero pronto se dio cuenta de que los interminables cambios de dirección y el ambiente explosivo del set eran insoportables. La película se convirtió en un éxito y todavía se habla de ella con cariño, pero no hay indicios de que Russell y Clooney vuelvan a trabajar juntos en el futuro.
Jan de Bont recibió atención médica más de una vez durante Roar
Antes de dirigir clásicos de culto como Speed y Twister, de Bont fue famoso por su trabajo en Roar, una película en la que una manada de leones deambulaba libre y deliberadamente por el set de rodaje, con muchas improvisaciones de por medio. El único problema de este ambicioso proyecto es que a los leones no les interesa seguir las instrucciones de los cineastas, ni dejaban pasar la oportunidad de una sabrosa comida. Tras 220 puntos de sutura, de Bont tuvo que pasar una larga recuperación en el hospital después de que le arrancaran el cuero cabelludo entre escenas. Aunque consiguió volver al rodaje y terminar la película, está claro que nunca más intentó rodar una película de este tipo.
Ser una estrella no es tan fácil como parece y hay cientos de historias entre bastidores que nos recuerdan que los famosos no son más que humanos y que pasan por momentos aburridos, extraños y raros como todos nosotros.
