Pinturas de Ed Sheeran: ¿plagio o vanguardia que apuesta por la beneficencia?

El fenómeno musical Ed Sheeran, conocido por agotar estadios y encabezar listas de éxitos globales, ahora busca expandir su impacto a un nuevo escenario: el arte. Sorprendiendo al mundo, el cantante británico exhibe sus abstracciones, curiosamente parecidas a las icónicas pinturas de goteo de Jackson Pollock, en la prestigiosa Galería Heni de Londres. Su exposición, inaugurada este viernes, lleva el intrigante título de «Pinturas Cósmicas de Aparcamiento«, un guiño al inusual proceso creativo que conlleva las pinturas de Ed Sheeran.

Pero la incursión de Sheeran en el arte va más allá de la mera exhibición. Su fundación también está vendiendo copias de estas obras por 900 libras (aproximadamente 1200 dólares) cada una. Un dato fascinante es que el 50% de las ventas de estas «Pinturas Cósmicas» beneficiará directamente a escuelas de todo el Reino Unido, una causa que el artista ha defendido fervientemente, señalando la sistemática falta de financiación en iniciativas educativas.

Sheeran reveló a The Guardian esta semana que lleva años coqueteando con el arte, pero que su práctica se intensificó en la última década. «El año pasado estuve de gira yendo y viniendo, y aproveché gran parte de mi tiempo libre en el Reino Unido para pintar», explicó. «Cada mañana iba corriendo a un aparcamiento abandonado en el Soho, pintaba, luego corría a casa y lo hacía a diario hasta que volvía de gira», creando así su particular estudio al aire libre.

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Las obras guardan un gran parecido con el arte de Pollock: están compuestas por marañas de pintura de varios colores, creadas al agitar un pincel húmedo sobre un lienzo colocado en el suelo, tal como lo hacía el propio maestro del dripping. De hecho, una fotografía en The Guardian muestra a Sheeran lanzando pintura roja, evocando intencionadamente las famosas imágenes de Hans Namuth de Pollock en acción. Sin embargo, un comunicado de Heni Gallery sugiere que las pinturas de Sheeran están «inspiradas en patrones celestiales» y en su «estilo expresionista de pintura salpicada», curiosamente, sin mencionar a Pollock.

Mientras las obras de Pollock eran concebidas como experimentos formales que buscaban distanciar la mano del lienzo, las de Sheeran no parecen tan evocadoras en su propósito. El comunicado de la galería, que omite toda referencia a Pollock, contrasta con la evidente similitud visual. Esto ha generado un debate en el mundo del arte.

Al menos un crítico de renombre no ha dudado en expresar su escepticismo. Jonathan Jones, también en The Guardian, calificó el arte de Sheeran como «una estafa astuta». Según Jones, al crear estas «creaciones abstractas, ligeras y sin sentido», el músico «evita el escrutinio adecuado y se adentra en el arte sin arriesgarse. ¡Menudo profesional, incluso siendo un aficionado!». Sin duda, la incursión artística de Ed Sheeran promete seguir dando de qué hablar, fusionando la fama pop con las controversias del mundo del arte contemporáneo.